lunes, 22 de diciembre de 2014

Innovación educativa. El colegio María Asunta de Castalla como ejemplo

Hoy en día, se habla de innovación porque existe una sociedad cambiante y con ella, todos los contextos que la engloban, desde instituciones hasta sujetos. Hablar de innovación bajo un prisma educativo es hablar de un proceso social, que afecta a todas las personas que tienen vinculación con el entorno educativo, así pues, estaríamos refiriéndonos a: alumnos/as, padres y madres de alumnos/as, profesorado, equipo directivo, políticos y en su conjunto a toda la sociedad, pues la educación es un pilar fundamental de nuestro día a día y de nuestra cultura, sin la cual no puede entenderse nuestro desarrollo.
La innovación educativa en palabras de Gairín (2002) “es una constante búsqueda de respuestas a la pregunta sobre qué cambios son necesarios y deseables que tengan las organizaciones en la sociedad del conocimiento, del aprendizaje permanente a lo largo de la vida (...)”.
Actualmente existe una gran sensibilidad hacia este término en el campo educativo, pues la mejora de la educación pasa por un cambio y este cambio empieza a entenderse desde la innovación. La innovación comenzó con pinceladas y ahora se está construyendo en y desde las escuelas. Empezó como un recurso individualizado, se comprobó que a nivel individual no funcionaba y se cambió por un trabajo de equipo, que requiere la implicación de todos/as.
En la medida en que la innovación incluye procesos vincula de una manera especial al sujeto con la mejora educativa y viceversa, de manera que, poco a poco, los cambios son visibles y se observa un aprendizaje real, que prepara para la vida.
Los centros educativos son contextos privilegiados para que se den innovaciones curriculares y por ende, unas mejoras educativas, así como los equipos de profesores/as son los verdaderos transformadores de esta innovación educativa. Son ellos/as quienes están capacitados para desarrollar una cultura colaborativa a través del diálogo profesional, el cual permite compartir experiencias y aprender de otros/as. Se trata de poner en marcha todas las herramientas que permitan trabajar contenidos, mediante estrategias y que éstos se constituyan en normas de funcionamiento verdaderas. 
En palabras de Mª Luisa Sevillano García (2009), catedrática de didáctica y organización escolar de la UNED “innovación implica una reflexión, una revisión, unas estrategias institucionales y sobre todo, el tener en cuenta las demandas sociales, que permiten preparar a los estudiantes para la vida real, su cotidianeidad y a nivel universitario para incorporarse a un mundo laboral real[1].

Colegio María Asunta

Imagen extraída de: www.escaparatedigital.com

El Colegio María Asunta es un ejemplo de centro que trabaja día a día por conseguir un proceso educativo a través del desarrollo de competencias cuya aplicación sea práctica y real, mediante una metodología que pretende el cambio de rol del profesor y una mayor implicación del alumnado en cada una de las asignaturas.
Este centro busca favorecer el aprendizaje de habilidades y de técnicas, bajo un marco competencial que haga factible el cultivo de los procesos de desarrollo, que permita la consecución de un trabajo colaborativo y lleve a un feedback sobre la tarea desarrollada. Busca el perfeccionamiento y desarrollo profesional del profesorado, al cual incita a estar en constante formación.
El colegio María Asunta,  se encuentra ubicado en la localidad alicantina de Castalla. Se trata de un centro educativo concertado de Infantil, Primaria y Secundaria, plurilingüe, cuya titularidad la ostenta el Instituto Secular Obreras de la Cruz (I.S.O.C.), cuyo fundador es D. Vicente Garrido Pastor. Este Instituto Secular nace para dar respuesta a las necesidades apostólicas y formativas de la clase trabajadora, especialmente la promoción de la mujer.
El colegio fue construido en el año 1954, en sus inicios únicamente estaba integrado por alumnas, pero con el paso de los años comenzó a ser un Colegio mixto, tanto para chicas como para chicos y así ha continuado hasta la actualidad. Cuenta con un equipo profesional formado por 32 integrantes, entre profesores/as, equipo directivo, maestros/as y otros profesionales, así como con un número aproximado de 357 alumnos/as, desde infantil 3 años hasta 4º de la ESO. El colegio está ubicado en la calle Colón nº 1 de Castalla (Alicante).
El centro educativo ofrece una Enseñanza de Calidad, de acuerdo con las exigencias de la nueva sociedad europea, pues cuenta, desde hace años con un sistema de gestión de la calidad, certificado por la Asociación Española de Normalización y Certificación (AENOR).
El colegio María Asunta trabaja en base a estos cuatro pilares:
v  Enseñanza personalizada. Cada alumno/a tiene entidad propia y como tal es atendido en todas sus dimensiones: intelectual, física, espiritual y social.
v  Cultura del trabajo. Todos y todas pueden lograr sus objetivos. Se trata de la  búsqueda de la excelencia motivando y potenciando el trabajo bien hecho.
v  Pedagogía activa. Clases dinámicas y atractivas, cuyo objetivo es la construcción conjunta y participación de todos/as.
v  Pedagogía de lo positivo. Refuerzo positivo para conseguir una motivación en el trabajo.
Los pilares sobre los que se asienta la enseñanza tienen similitud con los programas de innovación que hoy en día se desarrollan en todo el territorio nacional y son impulsados desde distintas instituciones y organismos, como pueden ser: Innovación en metodología, inclusión de nuevas tecnologías (TIC’s), innovación en cuanto a procesos curriculares y elaboración de materiales didácticos.
Puede decirse que el colegio Mª Asunta está en el camino de la innovación, pues  observa sus necesidades, se marca objetivos a alcanzar, desarrolla competencias a corto y largo plazo a través de asignaturas adaptadas realmente al alumnado y que permiten un aprendizaje más óptimo y menos repetitivo, se desarrolla en equipo y se esfuerza por trabajar los procesos educativos de la enseñanza-aprendizaje. La innovación se entiende como una ocasión para fomentar la cultura común y compartida entre los miembros del Colegio (Gairín, 2002).
Su directora, Remedios Cases de Lara, en un suplemento especial aparecido en el periódico ABC, hablaba de que “educar es un proceso de ayuda al desarrollo integral de la persona, significa "sacar a la luz" las potencialidades de nuestros alumnos y encauzarlas adecuadamente” (…) Educamos transmitiendo valores, de cara a forjar un talante de personas responsables, participativas y alegres, tolerantes, solidarias y dialogantes, respetuosas y valientes para testimoniar su fe, de amplias fronteras: fruto de ello es la implicación en diferentes proyectos solidarios (como el Desayuno solidario) que el I.S. Obreras de la Cruz tienen en Bolivia, Chile y Rwanda[2].



[1]     Programa de radio de la UNED “Innovaciones curriculares”. Emisión: 8-3-2009
[2]     ABC ESPECIAL, 29-01-2011, pág. 29 
Bibliografía: Gairín Sallán, J. (2002). La innovación educativa, cultura y transformación            permanente de las instituciones educativas. En A. Medina Rivilla, J. L. Rodríguez Diéguez y               M.ª L. Sevillano García (Coords.). Diseño, Desarrollo e Innovación del Currículum en las                   instituciones educativas. Madrid, Universitas

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