domingo, 23 de noviembre de 2014

Trabajar la empatía en el aula

Hace unas semanas, navegando por facebook, vi que algunas de las páginas que sigo, se hacían eco de la siguiente noticia que publicaba el periódico El Mundo: "Una asignatura llamada empatía"  y nada más leer el título, hice click sobre el enlace y fui directamente a leer el contenido que escondía el titular.

Esta noticia habla de una asignatura que se ha puesto en marcha este curso escolar en algunos colegios de Canarias, llamada Educación Emocional y para la Creatividad, e impartida en los cursos de 1º, 2º, 3º y 4º de Primaria a lo largo de dos sesiones semanales de 45 minutos cada una.

El Gobierno Canario introduce en el currículum esta asignatura, al ver el enorme éxito que había tenido una iniciativa anterior llamada “parejas pedagógicas”, en donde dos profesionales acompañaban a los niños en la transición de infantil a primaria, a sobrellevar mejor el cambio. Y con esa idea de sobrellevar mejor el cambio y canalizar mejor las emociones, nace Educación Emocional y para la Creatividad.

El objetivo de esta asignatura es “desarrollar la capacidad de gestionar de manera eficiente los sentimientos utilizando la razón”, “de reconocer y expresar las emociones” y de “regularlas, controlarlas y utilizarlas de forma productiva”.

La asignatura se divide en tres partes:
1ª parte: Alfabetización emocional, en donde se busca que los alumnos se conozcan a sí mismos, conozcan sus emociones y sepan apreciar emociones en sus compañeros/as, es decir, aprendan qué es la empatía y cómo ponerse en el lugar del otro.
2ª parte: Regulación emocional, en donde los alumnos/as aprenden a relacionarse con los demás y a resolver los posibles conflictos que puedan encontrarse en la escuela, en casa, en las actividades extraescolares…
3ª parte: Creatividad, aquí se trabaja la creatividad a todos los niveles y de todas las maneras posibles. Esta parte incluye infinidad de posibilidades en cuanto a temáticas de trabajo y metodología a utilizar.

Entre las características de esta asignatura destacamos
  • No existe libro de texto.
  • Se trabaja con situaciones cotidianas de la vida de los niños/as.
  • Se adapta el manejo de las emociones y la creatividad a la capacidad cognitiva de los niños/as.
  •  Se fomenta el trabajo en base a la premisa aprender a aprender y aprender haciendo.
  • Se fomenta el trabajo emprendedor de los alumnos/as porque se les permite la implicación y participación personal en cada una de las propuestas que se dan, e incluso, los propios niños/as pueden proponer temas y aspectos que les gustaría trabajar en esta asignatura.
  • Se trabaja la competencia digital, pues se utilizan soportes digitales, como la visualización de vídeos, la búsqueda de término en la web, la visita a páginas que trabajen actividades sobre las emociones…

¿Cómo trabajar las emociones, por ejemplo, el miedo?

El miedo es una emoción muy habitual en los niños/as. De hecho, tienen miedo a cosas o elementos a los que los adultos ni siquiera prestamos atención. En el ejemplo que plantea la noticia, un tobogán es un elemento que causa miedo a uno de los niños y podemos preguntarnos ¿cómo puede dar miedo un tobogán?, pues bien, debemos prestar atención como profesionales y padres y madres y hacer un esfuerzo por comprender por qué les da miedo un tobogán, y tratar de ser creativos para averiguar a qué les recuerda el tobogán, si son los colores, la forma o el lugar en el que está lo que les provoca tensión y todo ello se comprenderá mejor y podrá ser verbalizado, si se lo planteamos a los niños y niñas como actividades divertidas y entretenidas en las que ellos son los protagonistas.

Me encantan las palabras que incluye el currículum de esta asignatura: “El alumnado que es más feliz, confiado, asertivo, resiliente, original, innovador, audaz, equilibrado… tiene más éxito en la escuela y en la vida”. Creo que es muy importante que trabajemos con los niños/as desde bien pequeños este tipo de emociones y sentimientos, trabajemos la resiliencia, la empatía, la asertividad… Elementos que ayudarán en su preparación hacia la vida, elementos que harán que sepan afrontar las situaciones con las que se van a encontrar a diario, para canalizar mejor una rabieta, algo malo que les pase, suspender un examen, enfadarse con un amigo, así como fortalecer también las cosas buenas que les suceden y contribuir a que sus comportamientos vayan más encaminados hacia la bondad.
A nivel personal creo que, la escuela actual tiende a dejar de lado las emociones como elemento esencial de la educación y, personalmente, me encantaría que esta iniciativa Canaria pudiese trasladarse a otras comunidades autónomas. Considero que debería introducirse en el currículum de toda ley educativa y especificarse cómo debe llevarse a cabo según la etapa educativa. Veo necesario que los niños/as tengan la oportunidad de revelar o reconocer sus sentimientos y que puedan aprender a modelarlos y a manejarlos para comprenderlos y afrontarlos mejor.

Me gusta que sea el propio Servicio de Ordenación Educativa de la Consejería de Educación del Gobierno de Canarias, el embajador de esta iniciativa y que crea firmemente en ella, pues últimamente parece que las instituciones gubernamentales se centran mucho en qué cambiamos de esta ley educativa o de esta otra, pero poco en lo realmente relevante , que es que, el currículum que ellos/as manejan, finalmente es adaptado a nuestras escuelas y desarrollado en la enseñanza con nuestros niños/as y jóvenes, por lo que acaba teniendo una repercusión directa en su proceso de enseñanza-aprendizaje. Es por ello que, esta iniciativa, parte de una necesidad real de las escuelas, es trasladada a la Consejería y ésta ha adoptado unas medidas pioneras en España, implantando una asignatura que, aunque aparentemente le quita terreno a Lengua y Matemáticas, creo que a la larga se comprobará que con ella se benefician todas las asignaturas y además, puede trabajarse la competencia lingüística, la competencia de resolución de problemas, la competencia digital… desde un punto de vista más creativo y enriquecedor para los alumnos/as.

Me quedo con una frase de la noticia: “Las emociones son educables y se necesita de un espacio y un tiempo específico para que este aprendizaje se produzca”. 

Imagen extraída de: blog.es.idealist.org