Hoy termina el periodo de prácticas correspondiente al Prácticum I del Máster de Formación del Profesorado.
Al principio cuando me dijeron que me tocaba el IES Sixto Marco de Elche, no las tenía todas conmigo porque Elche estaba bastante lejos de mi casa y no conocía nada del funcionamiento de los IES de la zona. Era una ciudad que desconocía y me asustaba un poco la idea de no tener una percepción de qué me podría encontrar.
Unos meses después y tras haber realizado mis prácticas en el Sixto Marco, puedo decir que ha sido una experiencia magnífica y que ha sido el centro perfecto para realizar mis prácticas como orientadora educativa.
En la práctica es donde más se aprende, coinciden todos los alumnos del máster y de cualquier universidad y en mi caso, ha sido totalmente cierto.
He tenido la oportunidad de ver cómo funciona un departamento de orientación educativa, en un macro instituto, con 1049 alumnos/as, con una gran diversidad, con muchos programas en marcha y con una misión, visión y valores muy arraigados... ingredientes todos esenciales, para que cualquier agente educativo ponga todos sus sentidos a trabajar y que su práctica diaria enriquezca al máximo el proceso de enseñanza-aprendizaje del alumno/a.
Me he sentido muy arropada y acompañada desde el departamento de orientación, como de todo el profesorado con el que he tenido la oportunidad de hablar. He visto como se trabaja en base a los cuatro ámbitos de intervención: El PAD, el PAT, el POAP y el Plan de Convivencia y todas las actividades que en estos dos meses se han desarrollado en torno a estos planes.
Sin duda, un centro como el IES Sixto Marco, no deja indiferente a nadie. A mi me ha enriquecido muchísimo.
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